Por Keith Curlee
El aroma del triunfo de Cristo nos guía
Pero gracias a Dios, que en Cristo Jesús siempre nos hace salir triunfantes, y que por medio de nosotros manifiesta en todas partes el aroma de su conocimiento. Ciertamente, para Dios somos el fragante aroma de Cristo, tanto en los que se salvan como en los que se pierden. Para éstos somos olor de muerte, que lleva a la muerte, y para aquéllos somos olor de vida que lleva a la vida. ¿Quién está calificado para una tarea tan importante? Nosotros no somos como muchos, que negocian con la palabra de Dios, sino que hablamos de Cristo con sinceridad, como enviados por Dios, y en la presencia de Dios. 2 Corintios 2:14-17
SIEMPRE
Del lat. semper.
- adv. En todo o en cualquier tiempo.
- adv. En todo caso o cuando menos. Ocurra lo que ocurra, siempre quedará en buena situación económica.
- adv. Col. decididamente (‖ definitivamente).1
Esta palabra, siempre, ha sido marcada permanentemente en mi espíritu por el Espíritu Santo. Se menciona unas 62 veces en las Escrituras. Su orientación no está determinada por si la seguimos o no. La palabra siempre es eterna y nos guía a través del triunfo de Jesús sobre la muerte, el infierno y la tumba. No hay derrota, ni marcha atrás, en aquellos que son guiados por él. El triunfo no es un evento, porque Jesús ya fue crucificado y resucitado, y descendió a las partes más profundas de la tierra y en gloriosa victoria, “subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad. “(Efesios 4.8 RVA)
Su entrada triunfal fue celebrada y aclamada en la gloria de todo el cielo, no como su entrada en Jerusalén. El rey de la gloria redimió la creación y recuperó la escritura pública y legal que hace constar su otorgamiento como amo y dueño de la creación. No sólo eso, también tiene las llaves de la muerte y del infierno (Apocalipsis 1:18) y se sentó a la diestra del Padre. Una vez y para siempre instalado en el trono de Dios. Desde allí, él nos guía siempre en triunfo. Su triunfo es una actitud digna de agradecimiento perpetuo. Estamos siendo guiados en este triunfo, y debemos seguir perpetuamente en una mentalidad triunfante.
Pese a las circunstancias en nuestras vidas, la pérdida y los reveses en el mundo, podemos seguir en su triunfo. En los últimos tres años, ha habido un aroma de muerte que emerge entre los que están pereciendo, pero en nosotros los creyentes, el aroma del triunfo y somos llevados de vida en vida. Pese al estado de nuestros países, la pandemia, la globalización del gobierno, la religión y la economía, nuestra actitud triunfante es un aroma innegable, entre los que se están salvando, no sólo una vez, sino perpetuamente.
Estamos salvados, siendo salvados, y seremos salvados, en la medida en que sigamos fielmente al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, que siempre nos guían de triunfo en triunfo. Esta actitud debe revelarse en nuestra actitud y tiene ¡aroma de su triunfo! Pablo escribe en Filipenses 4:4: Regocíjense en el Señor siempre. Y otra vez les digo, ¡regocíjense! Y en el versículo 6: No se preocupen por nada. Que sus peticiones sean conocidas delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias, porque él nos lleva de triunfo en triunfo.
En las últimas horas de su vida mi madre, no dejaba de repetir: “Me guía él, me guía él, no consciente de lo terrenal, sino de Aquél que la llevaba en su triunfo final.
Me guía Él, con cuánto amor, en sendas justas, mi Señor;
En todo tiempo puedo ver, con mano tierna me guía Él.
En el abismo del dolor o donde intenso brilla el sol,
En dulce paz o en lucha cruel, con gran certeza le sigo a Él.2
¡Da voces de júbilo, Israel! ¡Regocíjate de todo corazón, hija de Jerusalén! (Sofonías 3:12-14)
Keith Curlee es el presidente y fundador de Triumphant Mercy Ministries, con un alcance global, particularmente en México, Centroamérica y el Medio Oriente. Keith y su esposa viven en Mobile, Alabama.
Notas
- Diccionario de la Real Academia Española
- He Leadeth Me (Me guía él) de Candi Pearson-Shelton
- A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas son de la Reina Valera Contemporánea.
- Usado con permiso